Jake Burns

Como estratega empresarial de AWS, Jake trabaja con ejecutivos de Tecnología Empresarial para compartir experiencias y estrategias sobre cómo la nube puede ayudarles a aumentar la velocidad y la agilidad a la vez que dedican más recursos a los clientes.

A lo largo de su carrera, Jake ha liderado transformaciones de TI a gran escala, que hoy en día son la base de su firme convicción de que cualquier empresa puede adoptar con éxito la nube y ahorrar dinero al mismo tiempo. Como vicepresidente de operaciones de TI de Live Nation, lideró un gran proyecto de consolidación de centro de datos que se enfocó en gran medida en la reducción de costes. Esa experiencia allanó el camino para cuando, unos años más tarde, el director ejecutivo de Live Nation lanzó un plan de modernización en la compañía, que incluía un mandato de adoptar AWS de manera integral. Jake reorientó su equipo para formar una nueva función de servicios en la nube en la compañía, y migró con éxito 118 aplicaciones, 668 servidores y 1PB de almacenamiento a AWS en 17 meses. La migración redujo los costes de TI en un 48 % durante el primer año y medio, todo sin costes de migración inflados.

Para Jake, un elemento fundamental para una migración exitosa a la nube consiste en centrarse en las personas para garantizar que los equipos tengan las habilidades necesarias para hacer el trabajo adecuadamente. Cuando Jake comenzó por primera vez el proceso de migración de Live Nation a AWS, no contaba con un presupuesto para recursos adicionales, más personal ni ayuda externa. Para llegar a ese punto con su equipo existente, necesitaba capacitar a sus miembros con más habilidades, rápidamente, para que pudieran tener la confianza suficiente para migrar toda la TI corporativa a AWS, incluidos algunos sistemas que implicaban varios desafíos por ser menos compatibles con las infraestructuras en la nube. Por esa razón, se concentró en capacitar a su equipo (y a sí mismo) y proporcionarle a sus miembros las nuevas habilidades que necesitarían. La experiencia le enseñó que el coste de la migración a la nube es directamente proporcional a la experiencia del equipo con la nube, una lección que hoy en día comparte con los clientes.

Otra lección importante de la carrera de Jake es la predisposición a la acción. Preparar a su equipo temprano con habilidades nuevas les permitió comenzar a hacer pruebas y aprender sobre la nube. Hoy, le recomienda a los clientes que no esperen (porque los competidores nunca lo hacen) y simplemente comiencen a probar cosas nuevas. Al mismo tiempo, le recuerda a los clientes que errar es normal dentro de cualquier proceso de aprendizaje. Compara el proceso de innovación con lo que implica capturar la foto perfecta y llamativa para la portada de National Geographic. La mayoría de fotógrafos tomarían cientos de fotos (y las descartarían) antes de obtener la imagen perfecta. El objetivo de los clientes hoy en día es superar esos 100 experimentos (y fracasos) rápidamente para que puedan encontrar una innovación exitosa que funcione en semanas, no en años. Tal y como lo ve Jake, ese tipo de agilidad solo puede ocurrir cuando las organizaciones experimentan rápidamente a bajo coste y con poco riesgo.

Por fuera del trabajo, Jake aplica su pasión por aprender y probar cosas nuevas a sus aficiones (se considera un “adicto al conocimiento”). Al elegir un nuevo pasatiempo, tiene dos criterios: uno, deben ser lo suficientemente arduos como para obligarle a crecer, y dos, su dificultad debe obligarle a concentrarse completamente en la actividad, condición que encuentra meditativa, ya que tranquiliza su mente. Esa filosofía le ha llevado a aprender Jiu-Jitsu brasileño, carreras de motos no competitivas, a convertirse en piloto de avión con licencia y, más recientemente, a esforzarse para obtener una licencia para manejar helicóptero.